La dermatitis es una afección de la piel que puede manifestarse con enrojecimiento, picor y descamación. Si tú o alguien de tu familia la padece, sabes lo incómodo que puede ser lidiar con los brotes y cómo estos afectan la calidad de vida. Aunque el tratamiento dermatológico es fundamental, la alimentación también juega un papel clave en la salud de la piel.
En este artículo te contaremos qué alimentos pueden ayudarte a mejorar el estado de tu piel, cuáles deberías evitar si tienes dermatitis y cómo pequeños cambios en tu dieta pueden hacer una gran diferencia.
¿Qué es la dermatitis y por qué aparece?
La dermatitis es un término general para referirse a inflamaciones de la piel. Existen varios tipos, como:
- Dermatitis atópica: Muy común en niños, con tendencia a la piel seca y picor.
- Dermatitis seborreica: Se presenta con descamación, especialmente en el cuero cabelludo.
- Dermatitis de contacto: Provocada por el contacto con sustancias irritantes o alérgenos.
Entre las principales causas de la dermatitis están la genética, la exposición a irritantes, el estrés y, por supuesto, la alimentación.
¿Qué alimentos pueden empeorar la dermatitis?
Aunque cada persona es diferente, algunos alimentos pueden desencadenar o agravar los síntomas de la dermatitis. Estos son algunos de los más comunes:
Lácteos
- Por qué evitarlos: Contienen proteínas que pueden desencadenar reacciones alérgicas, especialmente en personas con dermatitis atópica.
- Alternativa saludable: Sustituye la leche de vaca por bebidas vegetales (avena, almendra, soja) sin azúcares añadidos.
Gluten
- Por qué evitarlos: Algunas personas con dermatitis pueden tener sensibilidad al gluten, lo que provoca inflamación y brotes cutáneos.
- Alternativa saludable: Opta por cereales sin gluten como el arroz, la quinoa o el maíz.
Azúcares refinados
- Por qué evitarlos: Aumentan la inflamación en el cuerpo, lo que puede empeorar el estado de la piel.
- Alternativa saludable: Sustituye los dulces y refrescos por frutas frescas y agua con infusión de frutas naturales.
Alimentos procesados
• Por qué evitarlos: Contienen aditivos y conservantes que pueden irritar la piel.
• Alternativa saludable: Cocina en casa siempre que sea posible y elige alimentos frescos y naturales.
Alimentos que pueden mejorar el estado de la piel
La buena noticia es que una dieta equilibrada puede ayudar a mantener la piel sana y a reducir los síntomas de la dermatitis. Aquí tienes algunos de los mejores alimentos para incluir en tu dieta:
Frutas y verduras ricas en antioxidantes
- Beneficios: Ayudan a reducir la inflamación y a proteger la piel del daño oxidativo.
- Ejemplos: Zanahorias, espinacas, arándanos, fresas, brócoli.
Tip práctico: Añade espinacas y fresas a un batido matutino para empezar el día cuidando tu piel.
Pescados grasos
- Beneficios: Ricos en omega-3, que hidratan la piel y reducen la inflamación.
- Ejemplos: Salmón, sardinas, caballa.
Tip práctico: Prepara el salmón al horno con un toque de limón y hierbas aromáticas para una comida saludable y deliciosa.
Frutos secos y semillas
- Beneficios: Aportan vitamina E, ideal para mantener la piel hidratada y elástica.
- Ejemplos: Almendras, nueces, semillas de chía y de lino.
Tip práctico: Añádelos a tus ensaladas o toma un puñado como snack saludable.
Probióticos
- Beneficios: Ayudan a mantener un intestino sano, lo cual se refleja en una piel más equilibrada.
- Ejemplos: Yogur natural, kéfir, chucrut.
Tip práctico: Toma un yogur natural con frutas y semillas en la merienda para cuidar tu piel desde dentro.
Aceite de oliva virgen extra
- Beneficios: Rico en antioxidantes y grasas saludables que nutren la piel.
- Ejemplos: Úsalo en crudo en ensaladas o para cocinar a baja temperatura.
Tip práctico: Sustituye las salsas procesadas por un aliño casero con aceite de oliva, limón y hierbas aromáticas.
Otros hábitos que ayudan a mantener la piel sana
Además de la alimentación, hay otros factores que pueden influir en la salud de tu piel:
- Hidratación adecuada: Bebe al menos 1,5 litros de agua al día.
- Cuidado tópico: Usa cremas hidratantes específicas para pieles con dermatitis.
- Evita el estrés: Practicar técnicas de relajación puede ayudar a reducir los brotes.
- Protección solar: Siempre que salgas de casa, usa protector solar adecuado a tu tipo de piel.
