Si tu perro o gato se esconde temblando al oír petardos o cualquier ruido fuerte, no estás solo. Muchas mascotas desarrollan un miedo intenso ante sonidos inesperados, como fuegos artificiales o truenos. Aunque puede ser desconcertante, entender las razones detrás de este comportamiento y saber cómo actuar puede marcar la diferencia para su bienestar.
En este artículo te explicamos por qué las mascotas reaccionan así, cómo detectar su miedo y qué estrategias puedes usar para ayudarles en esas situaciones.
¿Por qué tienen miedo los perros y gatos a los ruidos fuertes?
El oído de los animales, especialmente el de los perros y gatos, es mucho más sensible que el nuestro. Mientras que nosotros podemos encontrar los petardos molestos, ellos los perciben como amenazas inminentes. Este miedo puede estar relacionado con:
- Instinto de supervivencia: Ruidos inesperados y estruendosos activan su respuesta de «lucha o huida».
- Falta de habituación: Si no han estado expuestos a este tipo de ruidos de forma progresiva, pueden percibirlos como algo peligroso.
- Experiencias traumáticas: Una mala experiencia previa con petardos, truenos o ruidos fuertes puede intensificar su temor.
Es importante recordar que cada mascota es única. Algunos perros o gatos son más propensos a este miedo debido a su personalidad o genética.
¿Cómo detectar el miedo en tu mascota?
El miedo en las mascotas no siempre es obvio. Algunos síntomas comunes incluyen:
- Esconderse: Buscan refugio en un lugar cerrado, como debajo de la cama o dentro de un armario.
- Temblores o jadeo excesivo: Una señal clara de que están nerviosos.
- Ladridos o maullidos inusuales: Intentan comunicar su incomodidad o pedir ayuda.
- Pérdida de apetito: Pueden dejar de comer hasta que se sientan seguros.
- Intentos de escape: Algunos perros o gatos intentan huir, incluso si están dentro de casa.
- Tener la cola hacia abajo o entre las piernas, orejas hacia atrás o pegadas a la cabeza, tener el cuerpo agachado o una postura encorvada son posturas que suelen adquirir los perros cuando están asustados.
Si observas alguno de estos comportamientos durante ruidos fuertes, es probable que tu mascota esté experimentando miedo o ansiedad.
Qué hacer para ayudar a tu mascota en casa
- Crea un espacio seguro: Prepara un lugar tranquilo en casa donde puedan refugiarse. Puedes usar su cama o una manta y asegurarte de que el entorno esté calmado.
Ejemplo: Mi perro suele esconderse en el baño durante los fuegos artificiales. Ahora preparo el espacio con su manta favorita y una luz tenue para que se sienta más cómodo.
- Usa sonidos relajantes: Música suave o ruido blanco puede ayudar a enmascarar el ruido de los petardos y reducir su ansiedad.
- Mantén la calma: Tu reacción influye en ellos. Si te muestras relajado y no exageras la situación, ellos también se sentirán más tranquilos.
- Evita reforzar el miedo: Aunque consolarles es instintivo, no es recomendable premiar su comportamiento temeroso con demasiada atención, ya que puede reforzar la reacción negativa.
¿Qué hacer si estás en la calle con ellos?
Si un ruido fuerte os pilla en la calle, sigue estas recomendaciones:
- Asegura su correa o transportín: Esto evitará que intenten escapar. Las huidas son peligrosas, especialmente si hay tráfico cerca.
- Habla con voz calmada: Utiliza un tono tranquilo para comunicarles que no hay peligro.
- Busca refugio temporal: Si es posible, entra en un lugar cerrado como una tienda o un portal hasta que pase el ruido.
Remedios naturales para calmar a tu mascota
Existen ingredientes naturales que pueden ayudar a reducir la ansiedad en las mascotas durante estas situaciones. Algunos de los más efectivos son:
- Melisa: Conocida por sus propiedades calmantes, puede reducir la ansiedad y promover la relajación en los animales.
- Pasiflora: Este extracto natural es ideal para combatir el estrés y el nerviosismo. Es seguro para perros y gatos, pero siempre consulta a un veterinario antes de administrarlo.
- Feromonas sintéticas: Imitan las feromonas naturales de los animales y les ayudan a sentirse más seguros.
Estos remedios suelen estar disponibles en formatos como sprays, difusores o suplementos, y son una gran opción para complementar las estrategias mencionadas.
¿Y si el miedo persiste?
Si, a pesar de tus esfuerzos, tu mascota sigue mostrando un miedo extremo, consulta con un veterinario. Pueden recomendarte:
- Terapia de desensibilización: Exponer gradualmente a tu mascota a ruidos similares en un entorno controlado para reducir su sensibilidad.
- Apoyo profesional: Un etólogo, especialista en comportamiento animal, puede diseñar un plan específico para tu mascota.
Claves para llevar a casa
- Crea un ambiente seguro: Un espacio tranquilo y preparado les ayuda a sentirse protegidos.
- Usa remedios naturales: Melisa y pasiflora son opciones eficaces para calmarles de forma natural.
- Consulta a un profesional si es necesario: No dudes en buscar ayuda veterinaria si el problema persiste.
Cuidar del bienestar emocional de nuestras mascotas es tan importante como atender su salud física. Con un poco de preparación y las herramientas adecuadas, puedes ayudarles a superar su miedo a los petardos y otros ruidos fuertes. ¡Tu mascota te lo agradecerá con todo su amor y confianza!
