
Rinosinusitis en invierno ¿cómo podemos tratarla?
La experiencia clínica indica que en invierno se concentra la mayor parte de los casos de rinosinusitis, llegando a alcanzar una frecuencia de hasta un 10-20% superior de la que ocurre en verano.

La experiencia clínica indica que en invierno se concentra la mayor parte de los casos de rinosinusitis, llegando a alcanzar una frecuencia de hasta un 10-20% superior de la que ocurre en verano.

La inflamación de la faringe puede ser de naturaleza infecciosa, alérgica, química o traumática y provoca sequedad de garganta. Hay diferentes afecciones que puede padecer nuestra garganta.

El dolor de garganta es dolor, carraspera o irritación de la garganta que con frecuencia empeora al tragar. La causa más frecuente de la faringitis es una infección viral, como un resfriado o la gripe.

Son varias las patologías que afectan a las vías respiratorias y que tienen una mayor incidencia en invierno. Rinitis, faringitis, resfriado, gripe, faringoamigdalitis, bronquitis o las bronquiolitis se encuentran entre ellas y, en su mayoría, el goteo nasal es un síntoma común.

La mucosidad ayuda a defendernos de los alérgenos y a mantener la mucosa nasal hidratada para que el aire que se respira contenga la temperatura y humedad adecuadas.

A diferencia de lo que la gente piensa, tener más o menos catarros no viene dado por los cambios de temperatura ni por la exposición al frío. El frío no tiene por qué afectar a nuestro sistema inmune, ni lo va a debilitar.